Sarga ha establecido un Canal Ético como herramienta de comunicación para la prevención, detección, investigación y resolución de cualquier situación de incumplimiento de la Ley, el Código Ético –elaborado recientemente por la empresa- o las normas internas. Esta vía simplifica y facilita la comunicación de posibles conductas irregulares, poco éticas o inadecuadas que pueden materializarse en riesgos penales para Sarga.
Durante las últimas semanas la empresa ha puesto en marcha una campaña de comunicación entre sus empleados con el objetivo de divulgar al máximo la implantación de este canal. El uso de esta herramienta es extensivo a clientes, contratistas, proveedores y otros terceros con los que Sarga mantenga una relación de negocio para que, de esta forma, pongan en conocimiento de la organización cualquier sospecha o conocimiento de alguna irregularidad que haya sido, esté siendo o vaya a ser cometida por un miembro de Sarga.
Además, con el fin de garantizar la confidencialidad de los usuarios del Canal Ético, la gestión de la herramienta es llevada a cabo por un gabinete especializado externo a la empresa pública.
Control de gastos
La empresa realizó a principios del pasado año un análisis de sus gastos generales con el objetivo de optimizar los recursos necesarios para realizar sus funciones sin menoscabo de un buen servicio. Fruto de este estudio, se tomaron diversas medidas basadas en un mayor control de los gastos generales; en la ejecución de contrataciones globales y en la adecuación de los recursos a las necesidades actuales. Así, Sarga consiguió en 2016 reducir sus gastos generales en un 8.21 % respecto a la cifra alcanzada en 2015. Las partidas que contribuyeron en mayor medida a este ahorro fueron las relativas a dietas y gastos de desplazamiento tales como vehículos, gasolina y aparcamiento.
Convenio colectivo
En marzo de 2017, Sarga y dos sindicatos -Candidatura Independiente y CSIF -, en representación de los trabajadores, firmaron el primer convenio colectivo de la empresa pública, tras más de cinco meses de negociaciones y 42 reuniones. El acuerdo es efectivo para todos los trabajadores y estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2018. El incremento de cotización a la Seguridad Social de las cuadrillas forestales a través de la creación de un mecanismo de bolsa de horas fue uno de los acuerdos más destacados. Además, el convenio garantiza los niveles mínimos de homologación con DGA en la Relación de Puestos de Trabajo (RPT), un trabajo que deberá estar aprobado antes del 30 de junio de 2017.
Este convenio supone un hito en la historia de Sarga que de esta forma sella definitivamente la fusión empresarial de Sirasa y Sodemasa acaecida en octubre 2012 y que supone la homogeneización de las condiciones de trabajo aplicables a todo su personal.
El convenio consolida los nuevos procedimientos de selección de personal, desarrollados bajo los principios de igualdad, publicidad, mérito y capacidad. Además, la empresa pública ha firmado este año un convenio con el INAEM.