El pasado 1 de enero se hizo efectivo el acuerdo del Brexit y se produjo la separación definitiva entre el Reino Unido y la Unión Europea. Las nuevas regulaciones comerciales acordadas in extremis entre ambas partes siguen generando muchas incógnitas para las empresas exportadoras. El servicio Ready for Brexit, que ofrece Aragón Exterior (Arex) junto con el Departamento de Agricultura del Gobierno de Aragón y con la colaboración de Ibercaja, continúa atendiendo consultas y asesorando a empresas afectadas.
Ante el elevado número de consultas que recibe Arex, se han organizado varios webinars con el fin de resolver las principales dudas y comprender el futuro escenario al que empuja esta separación. En el caso del encuentro celebrado el pasado miércoles y, de la mano de cuatro expertos que se encuentran en primera línea, el seminario permitió a más de medio centenar de asistentes conocer las dificultades que se están produciendo en los procesos de exportación. El nuevo marco regulatorio está siendo responsable de numerosos retrasos y paros en las fronteras con Reino Unido, mientras que las empresas siguen luchando con la burocracia adicional y, en muchos casos, con la falta de información.
Ignacio Molina, responsable de aduanas en GEFCO, destacó que “sí se puede exportar al Reino Unido, pero hay que ir con el tiempo suficiente y tener muy claro el procedimiento, el Incoterm que vamos a usar y la documentación a presentar.” El principal problema para la mayoría de las empresas, comentó el experto, es la dificultad de certificar el origen de la mercancía de cara a los aranceles. “El resultado es que tenemos almacenes y fronteras colapsados tanto en España como en Francia porque antes era un transporte directo y ha cambiado completamente”, explicó Molina, aunque se mostró optimista de que pronto se normalice la situación en las fronteras.
Los cambios de normativa fiscal son otro problema para las empresas, especialmente para las PYMES, y la falta de normativas claras genera todavía más dificultades. Sin embargo, en las últimas semanas ha habido buenas noticias, explicó Amparo Sanchís, directora de Derecho fiscal en BDO España: “Ahora sabemos que el IVA británico que las empresas españolas soporten se podrá recuperar en la mayoría de los casos, con lo cual no se convertirá en un coste más”. Sanchís lo manifestó como una novedad importante debido al reconocimiento de la reciprocidad de trato, a lo que añadía que “el IVA de importación británico también se podrá incluir en la declaración del IVA, no supondrá un coste financiero”.
Por su parte, Montserrat Feliu, socia directora de la consultora ExpatFeliu y que asesora a empresas industriales sobre los desplazamientos de trabajadores a otros países, aseguró que las nuevas leyes no van a ser desfavorables para los desplazamientos temporales. Sin embargo, aclaró que “para estancias de más de seis meses en el Reino Unido, ahora sí hay que pedir un visado”. En este sentido, la experta confirmó la continuidad del proceso natural de permiso extracomunitario, pero “para los españoles que van a ir allí a trabajar han creado un sistema por puntos para darle prioridad a la captación de talento y cualificaciones requeridas”. Se trataría de aspectos tales como tener una oferta de trabajo con un salario determinado, cualificaciones específicas o un alto nivel de inglés, entre otros.
La experiencia de los importadores y los retailers británicos es igual de complicada, o más, que la de los exportadores europeos. Tal y como relató el delegado de Aragón Exterior en el Reino Unido, Juan Galicia: “El mercado británico está reaccionando tarde con asuntos que pensábamos que ya deberían estar controlados”. Como consecuencia, los operadores logísticos tienen que incrementar su precio por los costes de tiempo que invierten en cumplimentar ese papeleo adicional. Galicia ratificó que “el comercio británico se está viendo afectado por los problemas de logística. Las empresas de transporte incrementan los precios y quien paga la moneda es el consumidor final.
El seminario online organizado por Arex permitió a más de 50 empresas aragonesas resolver muchas de las dudas que generan estos nuevos procedimientos en la exportación. A través del servicio “Ready for Brexit”, los expertos de la empresa pública continúan con su labor de asesoramiento y ayuda a través de varios webinars y del buzón online que permite consultas individuales sobre materia de aduanas, regulación o capital humano, entre otros.