La Jornada de Impulso a la Competitividad, que se celebró esta semana en Calatayud, puso de manifiesto el grado de satisfacción que muestran los empresarios por el asesoramiento y el respaldo económico que se les proporciona desde las empresas públicas.
Cuatro empresarios aragoneses contaron sus experiencias en esta jornada organizada por el Gobierno de Aragón a través de la Dirección GENERAL de Economía, y que cuenta con el apoyo de la Confederación de Empresarios de Aragón. La jornada tiene como objetivo dar a conocer las herramientas con las que cuenta el Ejecutivo para apoyar a los empresarios, las sociedades de la Corporación Empresarial Pública de Aragón Aragón Exterior (Arex), Avalia, Sodiar y Suma Teruel, como también el Instituto Aragonés de Empleo (Inaem).
Aragón Exterior es la sociedad que impulsa a las empresas desarrollar proyectos individuales en otros países. Sodiar aporta solvencia a los empresarios y les ayuda a crear puestos de trabajo gracias al apoyo financiero. Avalia facilita el acceso a financiación a pymes y autónomos, y el Inaem ofrece a las empresas servicios de intermediación laboral, selección de personal, gestiones de contratación, formación, etc.
Ruth Lázaro (Taisi):“Hemos hecho posible lo que somos gracias a Arex”
“Hoy, el éxito es sobrevivir y salir adelante”, afirmó Ruth Lázaro. La empresa José María Lázaro S. A. , afincada en Calatayud, se dedica a la fabricación de conservas de fruta para la industria alimentaria;
fruta confitada, almíbares y rellenos para helados, galletas, bombones o para cadenas de restaurantes. Taisi factura un 35% en exportación y aspira a alcanzar el 50%.
A comienzos del siglo XX, el abuelo de Ruth Lázaro hacía las primeras conservas y también los primeros pinitos para exportar:“Con una cesta de ciruelas se marchó a Perpignan”, contó Ruth. Su padre continuó con la empresa en 1969. “Él siempre entendió que el mundo NO tiene fronteras y que, si el mercado está ahí, ¿por qué NO salir? Viajó a Inglaterra, a Suecia, etc. , y, entre los años 70 y 90, la empresa hizo las primeras exportaciones a Japón, Singapur, Canadá y Australia”, explicó la responsable de la empresa, quien se incorporó a la empresa familiar hace dieciséis años. En la actualidad, la empresa Taisi se halla en fase de afianzamiento y desarrollo con dos objetivos:consolidar los mercados con que ya cuenta en Europa e ir creciendo en mercados de Europa del Este.
Taisi se puso en contacto con Aragón Exterior hace dos años para llevar a cabo un proyecto en Canadá. “Como la experiencia fue muy buena, volvimos a dirigirnos a ellos con la idea de exportar a India y a Emiratos Árabes. Queremos llegar a África y al sudeste asiático. Nuestros objetivos a medio plazo son Rusia, África subsahariana y Estados Unidos”, dijo Ruth. Para ella, lo más duro es “enfrentarse al folio en blanco, al mundo por delante”. Explicó que “la base es ir marcando puntos de llegada”.
“Arex me ha ayudado en estos países a conocer mercados y a vencer temores y dificultades reales, y me ha apoyado en esa implantación que estamos haciendo en nuevos países”. Para Ruth Lázaro, es fundamental buscar colaboraciones entre empresas, encontrar sinergias. Arex facilita estas colaboraciones a través de Arex Networking. Ruth está convencida de que existen muchas oportunidades en el mercado exterior. “Es imprescindible trazar un plan para saber a dónde queremos ir, pero es una carrera de fondo que merece la pena”.
Moisés Martínez (Ecosistema Digital de Negocios):“Sodiar es alguien que te entiende. Sodiar ofrece apoyo económico, pero también humano”
Moisés Martínez estudió Económicas y, en el año 1976, empezó a trabajar ayudando a emprendedores, valorando si su proyecto era viable o NO y facilitándoles asesoramiento económico. Se dio cuenta que las pequeñas empresas y los trabajadores autónomos tienen una serie de problemas habituales:“Son expertos en su negocio, pero NO en gestión. Al final, los gestores nos hemos convertido en hacedores de trámites, pero NO podemos ayudarles a que conozcan realmente cómo va su empresa”, explicó Martínez, quien advirtió en esta carencia una oportunidad de negocio.
“Trabajando con emprendedores me fui imbuyendo de su espíritu y quise hacer algo nuevo –explicó Martínez–. Corría el año 2010 y tenía miedo porque el proyecto requería mucho dinero, así que lo primero que hice fue rodearme de apoyos. El producto que hemos creado se llama “Cuéntica”, un sistema de gestión inteligente para autónomos que NO saben de gestión. Está en la nube y es completamente seguro, más que el propio ordenador. NO se necesita más que la aplicación y es inteligente;
sugiere pasos futuros, es fácil e intuitivo, y muy barato;
hay funcionalidades desde cero euros”. La apuesta de Cuéntica es “cambiar el mundo de las pequeñas empresas”, dijo Moisés. Ofrecen servicios gratuitos para la gestión y, a medida que el usuario pide ayuda, cobran pequeñas cuotas.
Comenzaron en junio 2010. Fueron un equipo de economistas e ingenieros informáticos quienes desarrollaron el sistema. “En 2011 hicimos una fase gratuita para que el cliente nos diera su opinión:fue una experiencia fascinante”, señaló Moisés Martínez. Ese mismo año salieron al mercado y, en 2013, han cubierto ya su primer ciclo.
“Mi empresa tiene dos cosas de valor –afirmó–:el equipo de personas y el producto que ofrecemos. NO tenemos muebles, solo ordenadores y pocos. Hemos conseguido crear un equipo de gente con mucho talento y conseguir tener un buen producto en el mercado. Lo fundamental es el factor humano:hay personas que hacen que las empresas funcionen y hay personas que NO”.
Moisés Martínez destacó el gran papel que Sodiar desempeñó en el lanzamiento de su empresa. “En Sodiar hay alguien que te entiende y alguien que te puede ayudar con la financiación de una forma más fácil que una entidad financiera. Sodiar ofrece apoyo económico, pero también humano”.
“Sigue habiendo oportunidades de negocio;
emprender es duro, pero, si haces las cosas bien, tiene buenos resultados. Es importante innovar abriendo nuevos mercados o haciendo las cosas de diferente manera”, dijo Moisés Martínez, quien concluyó resaltando la importancia del talento y también de la humildad:“He acabado convirtiéndome en el tonto de la empresa porque me he rodeado de gente más lista que yo y con más talento”.
Natividad Cuevas (NGB Maquinaria y Construcción):“En Avalia nos encontramos con personas que trabajan con personas”
La empresa NGB Maquinaria y Construcción, dedicada al alquiler y venta de maquinaria para construcción, obras públicas e industria, nació hace 25 años y “creció y se consolidó gracias a las corrientes positivas de tiempos pasados y a una política de empresas en la que prima la satisfacción de nuestros clientes, la pasión, la perseverancia, la lucha, el sacrificio y formar un equipo de personas con la convicción de crear un proyecto”, según Natividad Cuevas.
Sin embargo, a finales de 2008, después de la Exposición Internacional de Zaragoza, empezaron a notar “que se paraliza la previsión de obras contratadas para el Tranvía de Zaragoza, para la Ronda Norte, para Plaza, etc. ”, contó Cuevas, y añadió que:“el momento en que esa previsión de facturación comenzó a demorarse nos pilló con endeudamiento de compra de maquinaria nueva, y eso nos hacía difícil seguir con los compromiso de pago de la empresa”.
Esa circunstancia les hacía necesario “buscar tiempo, que es financiación”, y se pusieron en contacto con las entidades bancarias. Pero las entidades bancarias les pedían un aval de Avalia. Ellos mismos les concertaron una entrevista con Avalia. “Nos inspiraron confianza y profesionalidad desde el primer momento, y aportamos toda la información que nos pidieron. Les demostramos que creíamos en nuestra empresa: pusimos sobre la mesa todos los bienes que nos había costado una vida conseguir”.
Avalia acordó avalarlos y esta decisión dio a la empresa el tiempo y la liquidez que necesitaba para tomar las decisiones adecuadas y asegurar su futuro. “Avalia ha cumplido con creces nuestras expectativas”, afirmó Natividad y concluyó que “es importante luchar cada día por lo que uno cree para conseguir éxito en nuestras empresas, y existen herramientas con las que podemos contar”.
NGB Maquinaria y construcción comenzó con ferretería y pequeña herramienta. Hoy cuenta con una plantilla de 63 personas y delegaciones en Valencia y Pamplona, y tiene una facturación de siete millones.
Lucrecia Jurado (Amibil):“El trabajo de Inaem con el Centro Especial de Empleo ha sido espléndido”
Amibil es una empresa de Economía Social que trabaja en Calatayud y su comarca. Su germen fueron un grupo de padres y madres que, en 1994, se unieron para defender los derechos de sus hijos con discapacidad, que tenían que salir muy pronto de su ciudad para recibir la educación adecuada.
“Corrían los años prósperos y, sin embargo, nuestro proyecto NO era viable”, dijo Lucrecia Jurado, quien dirige este proyecto y, en vista de las dificultades, decidió sustituir la fase de espera por la fase activa. “Éramos una entidad sin ánimo de lucro, pero, entre 1994 y 2002, hicimos algo a favor de la discapacidad intelectual al servicio de la atención temprana y postemprana. En 2002 nos armamos en valor y por fin empezamos a recibir ayudas;
primero de proyectos europeos”. Gracias a su empeño, hoy cuentan con un aulario de educación especial en Calatayud y, desde el año pasado, con un Centro Especial de Empleo cuya plantilla está formada 19 personas:monitores, terapeutas, logopedas, etc.
“Hoy Amibil es un proyecto extendido en nuestra comunidad:hemos iniciado un proyecto social, hemos innovado, hemos implicado a todos los poderes políticos locales, comarcales y regionales, y nos hemos constituido en un proyecto de emprendimiento social con un ADN cuya implicación va más allá:estamos hablando de nuestros hijos, de personas con discapacidad intelectual. Nuestro producto son personas”.
“El trabajo de Inaem con el Centro Especial de Empleo ha sido espléndido”, dijo Jurado, quien añadió que el Inaem les ha permitido “mostrar las capacidades de las personas con las que trabajamos”. Gracias al Inaem han ampliado el centro asistencial y ofrecen servicios de jardinería a Servicios Sociales, empresas privadas, comunidades de propietarios, etc. “ NO solo hemos generado empleo directamente para los discapacitados, sino también, de manera indirecta, hemos creado empleo para otros profesionales que han colaborado con nosotros”, señaló Lucrecia Jurado.
La colaboración de Ambil con el Inaem comenzó en 2003 con unos cursos del Plan de Inserción Profesional. Hoy reciben una subvención salarial del Inaem del 50% y compiten con cualquier empresa de jardinería en Calatayud, solo que el servicio lo ofrecen personas con discapacidad, “que son personas con más dificultades para encontrar empleo”, matizó Jurado.